Mientras en el microbus, daba las vueltas de siempre, llegue a la parada más esperada o llegó lo que menos esperaba, mientras cantaba al son de <Auto rojo> un joven, no muy apuesto pero lindo, cantaba también, se veía extraño, se veía tan diferente, sin prestar atención a lo que hacía, mis labios comenzaron a tararear cada canción que se aproximo y para mi sorpresa él hacía lo mismo, movía sus pies al son de la canción y para ser honesta, no tenía mala voz... pero pronto llegó la parada en la que debía estar y sin querer queriendo, ese momento quedó plasmado en mi interior.